Netiquette o Netiqueta son las normas o reglas requeridas por la buena educación para moverse adecuadamente en Internet.
Cuando uno ingresa a una nueva cultura, y
el ciberespacio es una de ellas, se expone a cometer algunos errores.
Puede ofender sin proponérselo. O puede malinterpretar lo que
otros dicen y ofenderse cuando no era esa la intención. Para
hacer las cosas todavía más difíciles, hay algo
en relación al ciberespacio que hace muy fácil olvidar
que se está interactuando con otras personas que son reales.
Aunque normalmente las tendencias de etiqueta han evolucionado hasta
llegar a formar incluso parte de las reglas de ciertos sistemas, es
bastante común que las reglas de etiqueta se basen en un sistema de
“honor”; es decir, que el infractor no recibe siquiera una reprimenda. No obstante hay que tener en cuenta esas normas de buen comportamiento:
REGLA No. 1: Recuerde lo humano
La regla de oro que le enseñaron sus padres y sus primeros educadores
fue muy simple: No hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti.
Trate de ponerse en los zapatos de los otros. Defiéndase pero
trate de no herir los sentimientos de otros.
REGLA No. 2: Siga en la Red los mismos estándares de comportamiento
que utiliza en la vida real
En la vida real la mayoría de las personas obedecen la ley, ya
sea por voluntad propia o por miedo a ser descubiertos.
En el ciberespacio las posibilidades de ser descubierto parecen remotas.
Y posiblemente porque la gente a veces olvida que hay un ser humano
al otro lado del computador, creen que estándares éticos
o de comportamiento bajos, son aceptables.
La confusión es comprensible, pero están
equivocados. Los estándares de comportamiento pueden ser diferentes
en algunas áreas del ciberespacio, pero no más bajos que
en el mundo real. Recuerde ser ético.
REGLA No. 3: Sepa en que lugar del ciberespacio está
La “Netiqueta” varía de un dominio al
otro.
Lo que es perfectamente aceptable en un área puede ser condenable
en otra. Por ejemplo, en muchos de los grupos de discusión por
Televisión hablar de rumores es permisible. Pero enviar esos
rumores a una lista de correo de periodistas lo convertirá a
usted en a persona muy impopular.
Cuando entre a un dominio en el ciberespacio que
es nuevo para usted, debe darse tiempo para observar. Póngale
atención al “chat” o lea los archivos. Fórmese
una idea de cómo actúan las personas que ya están
participando. Y luego participe usted también.